lunes, 18 de octubre de 2010

YA NO QUIERO UN BMW

Hace dos noches en medio del insomnio estaba pensando en lo mucho que me gustan los coches. Entre ellos, los alemanes son mis favoritos indiscutibles y entre los alemanes el BMW. Pensé entonces, ¿cómo hacerle para tener un BMW sin necesidad de hipotecar a mis hijos? ¡Voilá! Trabajar en BMW. Como he agarrado callo en esto de buscar trabajo por internet me fuí a su página web. Esta resultó ser un poco decepcionante porque más que sobria parecía aburrida. Puedo entender que una marca de esta categoría, pase de los excesos gráficos, pero la encontré sosa. Pero aún así, no me dejé llevar por las apariencias y continué con mi  noble gesta. Entré a su bolsa de trabajo y encontré algo que me llamó tremendamente la atención: Ventas diplomáticas...¡Wow! Todo iba bien hasta que me topé con los requisitos...Licenciatura en Relaciones Internacionales y tope de edad.  Aún así decidí incluir mi información...rellené los campos de edad, sexo, estatura, peso, salud, edad de mis padres...y todo...Después de unos 45 minutos, envié la solicitud y más tardé en presionar el botón "send" que en recibir un mensaje muy "nice&cute" diciéndome que a pesar de tener un perfil muy interesante, no cubría algunos campos de la vacante. En mi fuero interno sabía que me pasaba de edad y de kilos y me quedaba corta en centímetros, pero mi experiencia a nivel internacional es considerable. He viajado  en dromedario por el Sahara, he tomado té verde en Kyoto, me han manoseado en el metro de México, he visto la sangre de toro correr en la arena de Las Ventas, he estado a punto de atropellar un taxista en Irlanda por falta de experiencia al conducir del revés...Lo único que echo en falta es ver canguros en el gran Outback australiano. Y aún así, por quedarme corta en centímetros y larga en kilos y edad, no soy candidato elegible para ir a venderle coches a los diplomáticos en México...Me pregunto ¿Cómo una máquina puede decidir si cumplo o no los requisitos? Está bien, admito que ser pluricultural y haber viajado un montón no me hace licenciada en Relaciones Internacionales, pero tampoco alguien que hable inglés al 100% y sea licenciado en dicha carrera es buen vendedor o buen RRPP. Tampoco ser rubia de 1.85 con 45 kilos garantiza el éxito de las transacciones...aunque pensándolo bien...quién sabe...De modo que no tener ni siquiera la oportunidad de unos ojos o un cerebro pensando..."esta mujer, se pasa en edad, se pasa en kilos, se queda corta en centímetros pero se pasa en experiencia cultural y en ventas...vamos a entrevistarla" da desazón. Porque al final del día, que ya estén recurriendo a máquinas sin corazón para elegir gente significa que las compañías también carecen de corazón, que si no encajamos en su pérfil al 100% ya no tenemos oportunidad...¿Dónde quedan las variables que le dan sabor a la vida? Y como a mí me gusta el sabor de las variables y pensar que no debe haber moldes...Ya no quiero un BMW

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