domingo, 23 de enero de 2011

NEGOCIACION, NEGOCIACION, NEGOCIACION

Digamos que ya lo peor pasó, ya te "aceptaron" después muchas entrevistas y según los que serán tus nuevos jefes eres el candidato ideal.
Ahora tienes que pasar a negociar la propuesta de trabajo. Muchas veces en el calor de la necesidad de encontrar ese recurso económico nos olvidamos que trabajar cuesta también. Hay niveles de salarios para todos y aunque creamos que las personas que ganan grandes cifras tienen la vida resuelta, todos, ABSOLUTAMENTE todos, tenemos necesidades y prioridades que debemos cubrir y resolver. En esta etapa de negociación debemos tener en cuenta diferentes factores como el trabajo que vamos a realizar. La pregunta es ¿el salario corresponde a la carga laboral y a nuestro conocimiento en la materia? Ojalá la respuesta fuera "sí" para todos los casos, pero en estas economías de guerra, es cada vez más frecuentes que traten de sacarte lo más por menos. No te de miedo negociar mejores condiciones. Si elevar la suma no es una opción discute otras prestaciones como seguros de gastos médicos, vales de despensa, fondo de ahorro, coche/gasolina, prima vacacional y aguinaldo. Siempre ten en mente el costo que representa para ti ir a trabajar para esta compañía.
Igual que en las entrevistas, la mejor manera de negociar es ser asertivo. No es para volverte arrogante, pero si ya te están haciendo una oferta es porque tú les interesas, de modo que recuerda siempre que tú eres la mejor opción. Negocia como si fueras un producto con múltiples beneficios, no ruegues ni te pongas ceñudo o de mal humor. Esto es importante, recuerda que no es personal ni te están humillando si una oferta es más baja de lo que esperabas, solo son negocios. Explica de manera clara cuáles son las ventajas de tenerte en el equipo, escucha de manera atenta la contrapropuesta y piénsalo bien. Nadie espera una respuesta inmediata y puedes pedir algo de tiempo para responder. De todas maneras si te comprometes a dar una respuesta en X tiempo, sé fiel a tu palabra y habla el día acordado. Si tu respuesta es negativa, dales las noticias de manera cortés y agradece la oportunidad que te brindaron. Recuerda que es mejor dejar las puertas abiertas siempre.

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